Dos personas, integrantes del Movimiento Campesino de Santiago del Estéro, fueron heridas tras un nuevo conflicto territorial. En el mismo día el juez que investigaba el asesinato de Cristian Ferreyra, ocurrido en noviembre pasado en Monte Quemado, presentó su renuncia.

El lunes 19 de diciembre a las 11 de la mañana, en el noroeste de Santiago del Estero, precisamente en el paraje Villa Matoque, dos miembros de la Unión de Pequeños Productores del Salado Norte (Uppsan, integrantes del Mocase fueron atacados por cuatro personas armadas que pretendían ingresar al campo comunitario.

Ariel Palacios debió ser trasladado a Salta, por un traumatismo de cráneo y su hermano Néstor Palacios, permanecía internado con un disparo en el pecho. El Mocase acusó del hecho a funcionarios municipales.

El paraje Villa Matoque queda en el límite con la provincia de Salta. En declaraciones radiales, Deolinda Carrizo, vocera del MOCASE explicó que “los compañeros fueron a decirle a la empresa que pare de alambrar porque un tal Villa se quiere apropiar de unas tierras que pertenecen a comunidades indígenas. Los chicos fueron atacados con disparos y golpes”.

Según se informa en el sitio web del MOCASE, los hermanos Palacios se encontraban junto a otros compañeros del movimiento intentando impedir que los enviados a alambrar ( integrantes de la empresa "Servicios y Negocios") acaparen más tierras de las comunidades. En ese momento aparecieron los hombres armados.

Las víctimas identificaron a los agresores. Se trata del secretario del Comisionado Municipal de Villa Matoque, Hugo Santillán, a su hermano, Eduardo Alonso Santillán y a otros miembros de su familia.

El conflicto se viene denunciando desde el año 2009 ante el Juzgado de Monte Quemado. Desde el MOCASE describen los sucesos de la siguiente manera: “el empresario tucumano Ricardo Villa llegó a la zona, y obliga a algunos pobladores a firmar contratos de venta de posesión, que nunca se cumplen. Ante la resistencia de las comunidades, se llevan a cabo los alambrados custodiados por un grupo de armados. El comisionado junto a su familia son los encargados de realizar la tarea".

El Comité de Emergencias para la Problemática de Tierras recorrió en diciembre de 2010 Villa Matoque. El informe oficial se llama “Informe Comisión Interinstitucional Caso Rumi Pozo-La Soledad, Departamento de Copo”. Detalla que recorrieron un campo en conflicto (Rumi Pozo) a 20 kilómetros del pueblo de Villa Matoque.

“Esta comisión se encontró con un grupo de personas que había montado una carpa frente a la Comisión Municipal y presentaba carteles con consignas de protesta contra el comisionado Santillán y su familia. Pudimos observar que en la sede de la Comisión Municipal se encontraba otro grupo y personal policial, que según nos relatan estarían custodiando la comisión”, señala el documento oficial y afirma que “el grupo que había armado la carpa frente a la comisión estaba integrado por representantes de cuatro organizaciones campesinas y familias de-salojadas. Manifestaron su total descontento con la intervención de la Comisión Municipal en la compraventa de tierras y en los conflictos que eso genera”.

También detalla que “el otro grupo” estaba integrado por quince personas, entre ellos “el secretario de la Comisión y su hijo (hermano y sobrino del comisionado), quienes manifestaron trabajar para la empresa (agropecuaria) Servicios y Negocios SA”.

La renuncia del Juez

El juez Alejandro Sarría Fringes, titular de la causa por el asesinado del miembro del Mocase presentó su renuncia en forma "indeclinable". El MOCASE había pedido el juicio político tras el asesinato de Cristian Ferreyra.

Según informa el diario Página 12, Sarría Fringes, renunció en momentos en que representantes del máximo tribunal provincial realizaban una auditoría en el Juzgado de Instrucción en lo Criminal y Correccional de Monte Quemado, que estaba a su cargo.

Por el asesinato del militante del Mocase y las heridas graves contra su compañero Darío Godoy, se encuentran detenidos el presunto autor de los disparos de escopeta, el cuidador del campo Javier Juárez y su propietario, el empresario santafesino Jorge Ciccioli.

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